Eumicetoma , la enciclopedia libre

Eumicetoma

Pie de madura
Especialidad infectología

Eumicetoma es una enfermedad fúngica[1]​ crónica granulomatosa[2]​ de humanos, que afecta principalmente los miembros, y a veces las paredes abdominales y del pecho o la cabeza.[3]Mycetoma pedis (micetoma del pie), la forma más común de micetoma, es conocida comúnmente como el pie de Madura. La infección es endémica en África, India y América Central y del Sur.[4]​ La enfermedad también ocurre en otras zonas pero no en escala endémica.[5][6]

Signos y síntomas[editar]

La lesión inicial es una hinchazón subcutánea pequeña luego de una herida pequeña. Posteriormente, se forman senos que descargan exudados purulentos y seropurulentos conteniendo granos que son colonias fúngicas.[3][7]​ La destrucción de tejidos profundos, y la deformación y pérdida de función de las extremidades afectadas puede occurrir en etapas avanzadas.[6]

Patogénesis y patología[editar]

La frecuencia de la presentación de la enfermedad en la piel, la costumbre común de andar descalzo en una región tropical y la recuperación de tantos de los microorganismos causantes de esta enfermedad en el suelo, condujo, a la suposición de que el micetoma se adquiere a partir de una implantación traumática en la piel. Tal implantación se presupone que va seguida por la multiplicación y producción en los tejidos de colonias del agente etiológico (gránulos). Por examen microscópico, tales gránulos aparecen cubiertos por un material proteico eosinofílico, más claramente discernible en la periferia, que representa la reacción hística del huésped. En la región inmediata a la lesión, esta reacción hística es característicamente supurativa, aunque en la periferia pueden apreciarse granulomas y células gigantes. En algunos casos raros, la infección puede extenderse a través del sistema linfático o circulación sanguínea a otros lugares.

Causas[editar]

El micetoma puede ser causado por bacterias del filo Actinomycetes, o por hongos (Eumycetes) en cuyo caso es denominado eumicetoma.[3][7]​ Las especies de bacterias y hongos que pueden causar micetoma se indican a continuación junto con los colores característicos de descarga de las heridas infectadas:[cita requerida]

Descarga roja

Descarga blanca o amarilla

Descarga negra

Algunas especies del género de bacterias Nocardia (incluida Nocardia asteroides y Nocardia brasiliensis) que pueden causar micetoma producen una descarga amarilla, y aquellas del género de bacterias Streptomyces (incluido Streptomyces somaliensis) producen una descarga amarilla o roja.[cita requerida]

Diagnóstico[editar]

Es general, se evidencia por la aparición de la propia lesión. Sin embargo, el diagnóstico etiológico suele establecerse normalmente por detección de gránulos en secciones de tejido no coloreado o en una extensión de pus. Los gránulos de la E.mycetomi, Madurella grisea. jeanselmi tienen un color que varia del marrón al negro, mientras que los de la A. boydii, A. madurae y N. brazilensis son de un color que varia del blanco al amarillo.

Dado que los raspados superficiales casi siempre están contaminados por bacterias u hongos menos patógenos, es mejor utilizar material de biopsia para los cultivos. Tampoco es aconsejable fiarse sólo del uso de medios de cultivo en los que se ha inducido selectividad por adición de antimicrobianos. Si se incluye cicloheximida se inhibirá la A. boydii y si se, incluye cloranfenicol o neomicina puede inhibirse la N. brazilensis. Sin embargo, en muchos casos es difícil aislar un hongo a menos que se utilicen medios que incluyan agentes antibacterianos. Ocasionalmente, se encuentran lesiones en los pies o en otros lugares a partir de las cuales solo se logra cultivar bacterias (notablemente especies de Staphylococcus y de Streptococcus). Tal enfermedad en algunas ocasiones, ha sido denominada por el término de botriomicosis. En todas cuantas raras ocasiones en que las lesiones debidas a la filariasis crónica (elefantiasis) quedan infectadas secundariamente y drenan de forma transitoria, esta enfermedad puede parecerse a un micetoma.

Tratamiento[editar]

Medicamentos tales como ketoconazol,[13]voriconazol,[14]​ y itraconazol[3]​ se emplean generalmente en el tratamiento de la infección. Los actinomicetos generalmente responden bien al tratamiento médico, pero los eumicetos son generalmente resistentes y pueden requerir intervenciones quirúrgicas que incluyen procedimientos de rescate como la resección ósea o incluso la amputación más radical.[5][7][6]

Pronóstico[editar]

El curso de la enfermedad es crónico y progresivo. En sus últimas fases las lesiones pueden resultar parcialmente incapacitantes, aunque el micetoma no suele provocar mortalidad.

Prevención[editar]

El uso extendido de zapatos o de otras prendas protectoras, lógicamente parece constituir una importante medida profiláctica en las regiones en que la enfermedad es frecuente.

No se ha demostrado que el control de los microorganismos causantes en el suelo sea útil ni posible. Por otro lado, dado que el eumicetoma puede ser provocado por una extensa diversidad de microorganismos, el desarrollo de vacunas no estaría justificado, incluso aunque fuera posible.

Referencias[editar]

  1. Brownell I, Pomeranz M, Ma L (2005). «Eumycetoma». Dermatol. Online J. 11 (4): 10. PMID 16403382. 
  2. Motswaledi HM, Mathekga K, Sein PP, Nemutavhanani DL (August 2009). «Paecilomyces lilacinus eumycetoma». Int. J. Dermatol. 48 (8): 858-61. PMID 19659864. doi:10.1111/j.1365-4632.2008.04047.x. 
  3. a b c d Davidson's principles and practice of medicine (20th edición). Churchill Livingstone Elsevier. 2006. p. 373. ISBN 9780443101335. 
  4. Hamilton Bailey's Demonstrations of Physical Signs in Clinical Surgery ISBN 0-7506-0625-8
  5. a b Efared, B; Tahiri, L; Boubacar, MS; Atsam-Ebang, G; Hammas, N; Hinde, EF; Chbani, L (2017). «Mycetoma in a non-endemic area: a diagnostic challenge.». BMC Clinical Pathology 17: 1. PMC 5288886. PMID 28167862. doi:10.1186/s12907-017-0040-5. 
  6. a b c El-Sobky, TA; Haleem, JF; Samir, S (2015). «Eumycetoma Osteomyelitis of the Calcaneus in a Child: A Radiologic-Pathologic Correlation following Total Calcanectomy.». Case Reports in Pathology 2015: 129020. PMC 4592886. PMID 26483983. doi:10.1155/2015/129020. 
  7. a b c Ananthanarayan BA, Jayaram CK, Paniker MD (2006). Textbook of Microbiology (7th edición). Orient Longman Private Ltd. p. 618. ISBN 978-8125028086. 
  8. Hemashettar BM, Siddaramappa B, Munjunathaswamy BS, etal (December 2006). «Phaeoacremonium krajdenii, a cause of white grain eumycetoma». J. Clin. Microbiol. 44 (12): 4619-22. PMC 1698411. PMID 17005754. doi:10.1128/JCM.01019-06. 
  9. «Filamentous Fungi». 
  10. Severo LC, Oliveira FM, Vettorato G, Londero AT (March 1999). «Mycetoma caused by Exophiala jeanselmei. Report of a case successfully treated with itraconazole and review of the literature». Rev Iberoam Micol 16 (1): 57-9. PMID 18473595. 
  11. Vilela R, Duarte OM, Rosa CA, etal (November 2004). «A case of eumycetoma due to Madurella grisea in northern Brazil». Mycopathologia 158 (4): 415-8. PMID 15630550. S2CID 35337823. doi:10.1007/s11046-004-2844-y. 
  12. Ahmed AO, Desplaces N, Leonard P, etal (December 2003). «Molecular detection and identification of agents of eumycetoma: detailed report of two cases». J. Clin. Microbiol. 41 (12): 5813-6. PMC 309011. PMID 14662990. doi:10.1128/JCM.41.12.5813-5816.2003. 
  13. Capoor MR, Khanna G, Nair D, etal (April 2007). «Eumycetoma pedis due to Exophiala jeanselmei». Indian J Med Microbiol 25 (2): 155-7. PMID 17582190. doi:10.4103/0255-0857.32726. 
  14. Loulergue P, Hot A, Dannaoui E, etal (December 2006). «Successful treatment of black-grain mycetoma with voriconazole». Am. J. Trop. Med. Hyg. 75 (6): 1106-7. PMID 17172376. doi:10.4269/ajtmh.2006.75.1106. 

Bibliografía[editar]